"Estudiantes nunca estuvo tan bien"
El padre de Juan Sebastián es uno de los referentes históricos indiscutidos del club.Como jugador, formó parte del aquel míticoplantel dirigido por Osvaldo Zubeldía, que se consagró campeón del mundo nada menos que en Inglaterra contra Manchester United en1968, donde incluso anotó el gol. Hoy, desde su desempeño como secretario técnico del club, califica como “brillante”el momentoque viven en todos los planos, y no duda en afirmar que si se mantiene la misma política institucional, Estudiantes no tardará mucho tiempo en volver a festejar un campeonato.
30.11.2006
HISTÓRICO. La auténtica Bruja, Juan Ramón Verón, con la platea de la vieja cancha de Estudiantes detrás. Nadie más autorizado que él para hablar de "Pincha".
Impresiona ver caminar a la Bruja. Las bermudas desnudan el mismo andar de la Brujita: piernas flacas y fibrosas, que parecen a punto de quebrarse, que amagan con perder la vertical. Juan Ramón Verón recorre el césped de la cancha de 1 y 57, lo único que va a quedar en pie cuando Estudiantes construya su nuevo estadio. El hombre mira el arco que tantas veces miró, y cuenta la historia que siempre contó: "Mis mejores goles los metí en este arco: un par a Gimnasia, en esos clásicos que comenzaron a dividir La Plata, y el más importante, a Palmeiras, en la final de la Libertadores del ’68, cuando en las diagonales empezó a escucharse la palabra mística".
Claro que el tema convocante no es ese pasado glorioso que pronto va a cumplir cuatro décadas. A Verón lo entusiasma este Estudiantes, el de los diez triunfos al hilo y casi único candidato a pelearle a Boca en la punta del Apertura.
“Esta campaña no es casualidad, se viene gestando desde que llegó Craviotto como entrenador. Después pasaron Bilardo, Malbernat, Mostaza, Burruchaga, todos sumaron, pero la diferencia es que ahora explotaron jugadores que antes eran muy jóvenes”, arranca.
—Cuando el que está arriba es Boca, ¿hay posibilidades de bajarlo?
—Lo más importante es que se hizo una buena campaña y que se está jugando bien. Y si no es en este torneo, Estudiantes está preparado para una buena campaña el que viene. Están saliendo chicos jóvenes, y eso le da al club la tranquilidad de que se está trabajando bien. Te diría que pocas veces en su historia Estudiantes estuvo tan bien como ahora en infraestructura, con los profesionales y en inferiores...
—Entonces no hay manera de que le pase lo mismo que a Gimnasia, que el año pasado peleó el Apertura y este año se cayó.
—Cuando un club está bien institucionalmente, maneja el aspecto económico y deportivo, tiene un técnico ordenado, jugadores que salen de abajo y la gente está conforme, tiene que hacer buenas campañas.
Por siempre Verón. La Bruja Verón es secretario técnico del club desde hace siete años, el nexo entre la Comisión Directiva y el plantel. Desde ese lugar, entonces, habla de algunas figuras. Dice de Pavone: “Mejoró un montón, ahora es un jugador más completo, que define con las dos piernas, con la cabeza, y tiene una polenta bárbara”.¿Calderón? “A los 36 años, trabaja mucho y se entrena más que todos.” ¿Y el Cholo?“Con Nelson Vivas formó un buen grupo. Trabajan mucho, y eso al jugador le abre los ojos, saben que no mienten.”
En la esquina de 1 y 57 hay un puesto que vende camisetas. El modelo es el de este Apertura: fondo negro, con rayitas rojas y blancas. Hay como 20, colgadas de un hilo, y todas de frente, menos una: la once de Verón.
— Mire, ¡qué símbolo!, ¿no?
—Yo también usaba la once. Mi hija, que juega al handball en Estudiantes, también.
— ¿Y su otro hijo, Iani?
—Está en la Cuarta, juega en el medio y quiere la once. Y después vendrá el hijo de Sebastián, que tiene seis años. En algún momento se la va a querer poner.
En Estudiantes, está claro, hay Verón para rato.
Claro que el tema convocante no es ese pasado glorioso que pronto va a cumplir cuatro décadas. A Verón lo entusiasma este Estudiantes, el de los diez triunfos al hilo y casi único candidato a pelearle a Boca en la punta del Apertura.
“Esta campaña no es casualidad, se viene gestando desde que llegó Craviotto como entrenador. Después pasaron Bilardo, Malbernat, Mostaza, Burruchaga, todos sumaron, pero la diferencia es que ahora explotaron jugadores que antes eran muy jóvenes”, arranca.
—Cuando el que está arriba es Boca, ¿hay posibilidades de bajarlo?
—Lo más importante es que se hizo una buena campaña y que se está jugando bien. Y si no es en este torneo, Estudiantes está preparado para una buena campaña el que viene. Están saliendo chicos jóvenes, y eso le da al club la tranquilidad de que se está trabajando bien. Te diría que pocas veces en su historia Estudiantes estuvo tan bien como ahora en infraestructura, con los profesionales y en inferiores...
—Entonces no hay manera de que le pase lo mismo que a Gimnasia, que el año pasado peleó el Apertura y este año se cayó.
—Cuando un club está bien institucionalmente, maneja el aspecto económico y deportivo, tiene un técnico ordenado, jugadores que salen de abajo y la gente está conforme, tiene que hacer buenas campañas.
Por siempre Verón. La Bruja Verón es secretario técnico del club desde hace siete años, el nexo entre la Comisión Directiva y el plantel. Desde ese lugar, entonces, habla de algunas figuras. Dice de Pavone: “Mejoró un montón, ahora es un jugador más completo, que define con las dos piernas, con la cabeza, y tiene una polenta bárbara”.¿Calderón? “A los 36 años, trabaja mucho y se entrena más que todos.” ¿Y el Cholo?“Con Nelson Vivas formó un buen grupo. Trabajan mucho, y eso al jugador le abre los ojos, saben que no mienten.”
En la esquina de 1 y 57 hay un puesto que vende camisetas. El modelo es el de este Apertura: fondo negro, con rayitas rojas y blancas. Hay como 20, colgadas de un hilo, y todas de frente, menos una: la once de Verón.
— Mire, ¡qué símbolo!, ¿no?
—Yo también usaba la once. Mi hija, que juega al handball en Estudiantes, también.
— ¿Y su otro hijo, Iani?
—Está en la Cuarta, juega en el medio y quiere la once. Y después vendrá el hijo de Sebastián, que tiene seis años. En algún momento se la va a querer poner.
En Estudiantes, está claro, hay Verón para rato.